En la mitología griega, el Argo (en griego Ἀργώ) es la nave en la que navegaron desde Yolco en busca del vellocino de oro, Jasón y sus compañeros argonautas. La mejor fuente del mito son las Argonáuticas de Apolonio de Rodas. Fue construido por Argos, y por tanto, bautizado en su honor. La proa del Argo tenía los dones del habla y la profecía porque contaba con madera de roble procedente del oráculo de Dodona. La nave y su tripulación fueron especialmente protegidos por la diosa Hera.
En 2008 se construyó y botó una réplica de una pentecontera de la época micénica griega, a la que se bautizó con el nombre de "Argo" y se completó el viaje hasta las costas de la actual Georgia con remeros voluntarios. Fue construida por las autoridades de la ciudad de Volos, en Grecia central, y fue expuesta de manera permanente en un museo expresamente construido para su exhibición.