Balonmano | ||
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Autoridad deportiva | Federación Internacional de Balonmano | |
Otros nombres | Hándbol, Handball | |
Características | ||
Contacto | Deporte con las manos | |
Miembros por equipo | 7 por equipo en la cancha ( un máximo de otros 7 suplentes intercambiables mínimo de 4 jugadores) | |
Categoría | Deporte de equipo | |
Pelota | esférica | |
Lugar del encuentro | Pista rectangular de 40 × 20 m | |
Duración del encuentro | 60 min. (2 partes de 30 min.) | |
Formato del puntaje | Gol, 1 punto | |
Meta | Portería de 3 × 2 m | |
Olímpico |
Masculino: desde 1972 Femenino: desde 1976 | |
El balonmano, hándbol o handball[1] es un deporte de pelota en el que se enfrentan dos equipos que tienen como objetivo anotar más goles que su adversario en el arco o porteria contrario, similar pero más pequeño que el del fútbol o hockey, para lo cual deben transportar la pelota botándola (picándola) con las manos o dando una cantidad limitada de pasos, y pasándola a otro jugador de su equipo, con reglas muy similares a las del baloncesto en este sentido.
Cada equipo se compone de 7 jugadores (6 de campo y un portero), pudiendo el equipo contar con otros 7 jugadores (o menos, o ninguno) y hasta 9 reservas en competiciones oficiales que pueden intercambiarse en cualquier momento con sus compañeros. Se juega en un campo rectangular, con una portería a cada lado del campo. El objetivo del juego es desplazar una pelota a través del campo, valiéndose fundamentalmente de las manos, para intentar introducirla dentro de la portería contraria, acción que se denomina gol. El equipo que marque más goles al concluir el partido, que consta de dos partes de treinta minutos, es el que resulta ganador, pudiendo darse también el empate.
Han sido muchos los juegos de pelota que han utilizado las manos a lo largo de la historia; no obstante, el balonmano moderno es relativamente reciente, pues sus primeras reglamentaciones se remontan a los últimos años del siglo XIX y la normalización definitiva de las mismas no llegó hasta 1926, año en que se uniformizaron las reglas para el juego entre equipos de once jugadores y al aire libre, el denominado balonmano a 11.[2] Dicha modalidad llegó a participar en los Juegos Olímpicos de Berlín 1936, pero con el paso de los años, el balonmano comenzó a practicarse en pista cubierta, lo que hizo que el número de jugadores se redujera a siete. Pese a que durante un tiempo convivieron el balonmano a once y a siete, solo este último pervivió, debutando como deporte olímpico en los Juegos Olímpicos de Múnich 1972.[2]