En julio de 751, fuerzas Tang y abasíes se encontraron en el valle del río Talas para competir por el control sobre la región del Sir Daria de Asia central. Después de varios días de estancamiento, los karlukos, que originalmente se aliaron con los Tang se pasaron a los abasíes y con ello desequilibraron las fuerzas, lo que dio como resultado una derrota Tang. Solo 2000 chinos sobrevivieron a la batalla. La victoria árabe-turca supuso el fin de la expansión china por la región de la Asia central, que se integró desde ese momento y de forma definitiva en la cultura islámica. Quedó asegurado el control musulmán sobre la Transoxiana durante los siguientes 400 años. El control de esta región fue económicamente beneficioso para los abasíes debido a que estaba en la ruta de la seda. Los historiadores debaten si los prisioneros chinos capturados con posterioridad a la batalla llevaron la tecnología de la fabricación del papel a Oriente Medio, donde con el tiempo se difundió hasta Europa.[12]
↑La fuerza de los árabes no está registrada en esta batalla, pero según fuentes chinas en 718 tenían 900 mil soldados en Jorasán (Bai 2003, pp. 225–226).
↑ abLos regulares chinos explotando la zona al oeste del núcleo continental chino nunca pasó de 30 000 entre 692–726. Sin embargo, elTongdian (801), la más antigua narración de la batalla propiamente dicha por cualquiera de los dos bandos sugiere 30 000 muertos, mientras que el Tangshu (945) cuenta 20 000 (incluyendo ya probablemente mercenarios) en esta batalla (Bai 2003, págs. 224–25). El relato más antiguo en árabe para la batalla en sí de Al-Kamil fi al-Tarikh (1231) sugiere 100 000 tropas (50 000 muertos y 20 000 prisioneros), sin embargo Bartold considera que son una exageración (Xue 1998, págs. 256–57; Bartold 1992, págs. 195–96).