Bosque petrificado se refiere a un yacimiento paleontológico en el que abundan los fósiles de árboles.
La fosilización de la madera es un conjunto de procesos por los que todo el material orgánico ha sido reemplazado con minerales (la mayoría de las veces variedades de la sílice), conservando en algunos casos de permineralización los detalles más delicados de la madera, como las paredes celulares. El proceso de petrificación sucede bajo tierra, cuando la madera queda enterrada bajo sedimentos, conservándose gracias a la ausencia de oxígeno. El agua rica en minerales que se filtra por los sedimentos deposita minerales en las células de la planta, de forma que cuando la lignina y la celulosa se descomponen, se forma un molde de roca en su lugar.
Elementos como el manganeso, el hierro y el cobre presentes en el agua y el fango durante el proceso de petrificación dan a la madera una variada gama de colores. Los cristales de cuarzo puros son incoloros, pero cuando se añaden contaminantes al proceso adquieren un color amarillo, rojo o de otra tonalidad.
La madera petrificada puede conservar su estructura original con todo detalle, hasta el nivel microscópico. Estructuras tales como los anillos de crecimiento y los diversos tejidos pueden observarse con frecuencia. La madera petrificada tiene una dureza en la escala de Mohs de 7, la misma del cuarzo.