Domingo Anaya fue un militar mexicano que participó en la Guerra Cristera.[1][2] De familia muy humilde, fue zapatero en su localidad natal. Luego del estallido de la cristiada, los generales Waldo Garza y Rivas Guillén utilizaron gases en contra del Gral. Anaya en el municipio de San Francisco del Rincón.[3] Murió en la Hacienda de San Isidro, Guanajuato, el 28 de marzo de 1928, cuando los generales Jaime Carrillo y Genovevo Rivas Guillén rodearon su tropa, causando 116 muertos y 47 prisioneros, que finalmente fueron fusilados.[4]