Fentanilo | ||
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Nombre (IUPAC) sistemático | ||
N-(1-(2-feniletil)-4-piperidinil)-N-fenil-propanamida | ||
Identificadores | ||
Número CAS | 437-38-7 | |
Código ATC | N01AH01 | |
PubChem | 3345 | |
DrugBank | APRD00347 | |
Datos químicos | ||
Fórmula | C22H28N2O | |
Peso mol. | 336,471 g/mol | |
Farmacocinética | ||
Biodisponibilidad |
92% (transdermal) 50% (bucal) | |
Unión proteica | 80-85% | |
Metabolismo | hepático primariamente por CYP3A4 | |
Vida media | 7 h (rango 3–12 h) | |
Excreción | renal | |
Datos clínicos | ||
Cat. embarazo | ? (EUA) | |
Estado legal | Grupo I ℞-Receta especial requerida (MEX) Lista II (EUA) Estupefaciente | |
Vías de adm. | Inhalación, Transmucosal, Intravenoso, Oral, Intranasal, Rectal, Intramuscular, vía transdérmica. | |
El fentanilo es un potente opioide agonista sintético utilizado como analgésico. Tiene una potencia superior a la morfina, por lo que se emplea a dosis más bajas que ésta, siendo el efecto final a dosis equivalentes, similar al de la morfina. Se emplea por vía transdérmica en forma de parches, que liberan gradualmente el medicamento, por vía sublingual, en forma de aerosol nasal, comprimidos para chupar, vía intravenosa y vía epidural. Por vía intravenosa tiene un comienzo de acción rápido de 30 segundos y un efecto máximo de 5 a 15 minutos, con una duración de la acción de 30 a 60 minutos. Por vía epidural o intradural, el comienzo de la acción tiene lugar entre 4 y 10 minutos después de la administración, el efecto máximo se alcanza en unos 30 minutos y la duración de acción es de 1 a 2 horas. Se elimina fundamentalmente por metabolismo hepático.[1]
Los efectos secundarios comunes incluyen náuseas o vómitos, estreñimiento, sedación, confusión y lesiones relacionadas con la mala coordinación.[2][3] Los efectos secundarios graves pueden incluir disminución de la frecuencia respiratoria (depresión respiratoria), síndrome serotoninérgico, hipotensión o desarrollo de un trastorno por consumo de opioides.[2][3] El fentanilo actúa principalmente activando los receptores opioides μ.[2] Su potencia analgésica es unas 100 veces superior a la de la morfina y unas 50 veces más que la de la heroína. Algunos análogos de fentanilo como carfentanilo son hasta ~10.000 veces más potentes que la morfina.[4]
El fentanilo fue sintetizado por primera vez por Paul Janssen en Bélgica en 1960 y aprobado para uso médico en los Estados Unidos en 1968.[2][5] En 2015, se utilizaron 1.600 kg (3.500 libras) en la atención médica a nivel mundial.[6] En 2017, el fentanilo era el opioide sintético más utilizado en medicina,[7] y fue el medicamento número 250 más comúnmente recetado en los Estados Unidos, con más de 1,7 millones de prescripciones.[8][9] Está incluido en la Lista de Medicamentos Esenciales de la Organización Mundial de la Salud.
En los últimos años, el fentanilo ha irrumpido en el mercado norteamericano de drogas ilegales, aprovechando la demanda preexistente de opiáceos como la heroína y los medicamentos recetados. En 2016, el fentanilo y sus análogos fueron la causa más común de muerte por sobredosis en los Estados Unidos con más de 20.000 casos, aproximadamente la mitad de todas las muertes relacionadas con opioides.[10][11][12] La mayoría de los sucesos de muerte por sobredosis se debieron al fentanilo fabricado ilegalmente.[13] Existe la preocupación de que la creciente demanda pueda resultar muy atractiva para el crimen organizado y los aspirantes a delincuentes, especialmente aquellos que operan en áreas del Triángulo Dorado en el sudeste asiático y el Estado Shan en Myanmar (antigua Birmania), donde la producción de drogas sintéticas se ha expandido drásticamente durante la última década. Comparada con la heroína, es más potente, tiene mayores márgenes de ganancia y, debido a que es compacta, tiene una logística más simple. Puede reducir, o incluso reemplazar por completo, el suministro de heroína y otros opiáceos.[14][15]