En la mitología nórdica, Freyr (a veces traducido al inglés como Frey, palabra que proviene de frawjaz, ‘señor’[1]) era el hijo de Njörðr y el hermano de Freyja.
Era el dios de la lluvia, del sol naciente y de la fertilidad. Es uno de los Vanir, los cuales viven en Vanaheim. Señor de la vegetación, Freyr poseía la summarbrander (la "espada del verano", que sabía moverse y luchar sola por los aires), pero la abandonó por conquistar a Gerda, una gigante virgen. Posee el jabalí de oro Gullinbursti, regalo de los enanos Sindri y Brokk, que tira de un carro tan deprisa como un caballo al galope, y cuyo resplandor ilumina la noche; también el barco Skíðblaðnir, y un caballo que ignora todos los obstáculos. Es el dios favorito de los elfos.
Es uno de los dioses más importantes del paganismo nórdico. Freyr estaba asociado con la realeza sacra, la virilidad y la prosperidad, con el sol y el buen tiempo, y era representado como un fálico dios de la fertilidad, que "otorga paz y placer a los mortales". Freyr, al que a veces se refieren como Yngvi-Freyr o Ingunar-Freyr, está especialmente asociado con Suecia y considerado como un antepasado mitológico de los reyes de la casa real sueca.[2][3]