El hematocrito es el porcentaje que ocupa la fracción sólida de una muestra de sangre anticoagulada, al separarse de su fase líquida (plasma). Está determinado casi enteramente por el volumen que ocupan los glóbulos rojos (también llamados hematíes o eritrocitos).[1] Los valores medios varían entre el 41 y el 53 % en los hombres, y entre el 36 y el 46 % en las mujeres,[2] debido a la mayor musculatura y por ende mayor necesidad de oxígeno en los hombres. Estas cifras pueden cambiar de acuerdo con diversos factores fisiológicos, como la edad y la condición física del sujeto; también la altitud, la postura y el tabaquismo. Es una parte integral del hemograma, junto con la medición de la hemoglobina, y el recuento de eritrocitos, leucocitos y plaquetas.