John William Godward | ||
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Probable autorretrato de Godward que aparece en su obra Waiting for an Answer de 1889. | ||
Información personal | ||
Nacimiento |
9 de agosto de 1861 Wimbledon (Londres) | |
Fallecimiento |
13 de diciembre de 1922 (61 años) Londres | |
Causa de muerte | Suicidio por inhalación de gas | |
Sepultura | Cementerio de Brompton | |
Nacionalidad | Británica | |
Familia | ||
Padres |
John (1836-1904) Sarah Eborall (1835-1935) | |
Información profesional | ||
Área | Pintura | |
Movimiento |
Neoclasicismo Prerrafaelismo | |
Género | Figura y escena de género | |
John William Godward (Wimbledon, Londres, 9 de agosto de 1861-Fulham Road, Londres, 13 de diciembre de 1922) fue un pintor británico cuya extensa producción,[1] determinada por un extraordinario virtuosismo, coincide cronológicamente con el final del periodo prerrafaelita en Inglaterra.
Pero la llegada de nuevas corrientes estéticas al panorama plástico europeo harán de su figura «un imitador de Alma-Tadema, con el que a veces se confunde» (Christopher Wood. Victorian Painting, 1.ª ed.),[2] «un pedante del pincel» o «el pintor de un mundo insípido de mujeres lánguidas sentadas en bancos de mármol».
Cabe mencionar en este sentido la posible existencia de una nota hallada, al parecer, junto a su cadáver y en la que el artista se lamenta de vivir en un mundo no lo bastante grande para él y un Picasso.[3]
Sea como fuese, el éxito le asistió desde sus primeras muestras, lo que —si bien hay que tener en cuenta que sus obras no alcanzaron nunca las cuantías de las de Alma-Tadema u otros maestros de la generación precedente— le permitió vivir con cierto desahogo, pese a lo cual llevó una existencia que, sin duda, se puede calificar de sobria.
Su pintura, que se mantuvo prácticamente invariable a lo largo de toda su carrera, se caracteriza por un dibujo meticuloso, una precisión casi fotográfica en el tratamiento de los detalles y un colorido brillante y diáfano.
Aparecen en ella una serie de elementos iconográficos extraídos de otros autores de la época como los fondos de Alma-Tadema, el tratamiento de los ropajes de Frederic Leighton, las sencillas composiciones a base de uno o, a lo sumo, dos figuras de Albert Joseph Moore o las puestas en escena de Edward Poynter.