En las mitologías germana y nórdica, los jotun (en nórdico antiguo jötunn o jǫtunn) eran una raza de seres (a menudo llamados «gigantes») con fuerza sobrehumana, descritos como la oposición a sus primos los dioses (los æsir y los vanir), a pesar de que frecuentemente se mezclaban o incluso se casaban con ellos. También se les compara con otras razas no humanas como los enanos o los elfos, si bien tales categorizaciones no son siempre mutuamente excluyentes. Los seres que se mencionan dentro de los jotun son también llamados por otros varios nombres, entre ellos risi, þurs (o thurs) y trol en el caso masculino y gýgr o tröllkona en el de las hembras. Los jötnar suelen vivir en las fronteras entre dioses y humanos en tierras como Jötunheim. En particular, su residencia-fortaleza es conocida como Utgard y está situada bajo las raíces de Yggdrasil, en el Jötunheim, uno de los nueve mundos en la cosmología nórdica, separado de Midgard, el mundo de los hombres, por altas montañas y densos bosques. Cuando viven en otro mundo que no sea el suyo, parecen preferir cuevas y lugares oscuros.[1]
Los jötnar son mencionados frecuentemente en todo el registro escrito en nórdico antiguo, y el término derivado eotenas (en inglés antiguo) también aparece en el poema épico Beowulf. El uso de los términos es cambiante, y se evidencia una tendencia general a que estos seres sean descritos de manera cada vez menos impresionante y más negativa a medida que el cristianismo se hizo más influyente. Aunque el término «gigante» se utiliza a veces para glosar la palabra «jötunn» y sus aparentes sinónimos en algunas traducciones y textos académicos, algunos académicos lo consideran problemático, ya que los jötnar no son necesariamente de gran tamaño.
Los términos para referirse a estos seres también tienen cognados en folclores posteriores, como en el yotun del folclor inglés, el jætte en el folclor danés y el jätti en el folclor finlandés, criaturas que pueden compartir algunas características comunes, como las de convertirse en piedra durante el día o vivir en las periferias de la sociedad.