Los Juramentos de Estrasburgo (en latín: Sacramenta Argentariae; en francés: Serments de Strasbourg) son unos juramentos de ayuda mutua prestados el 14 de febrero de 842[1] entre dos de los nietos de Carlomagno, Carlos el Calvo y Luis el Germánico, contra su hermano Lotario, donde se encuentra el primer testimonio de una lengua romance hablada en Francia, ya claramente distinta del latín, que marcan el nacimiento de la lengua francesa. Los Juramentos de Estrasburgo fueron declarados y redactados en este protofrancés y en teudisca lingua (lengua germánica), por cada uno de los dos monarcas en la lengua del otro, y después por sus tropas, de modo que todo el mundo pudiese comprenderlo.[1]
Fueron transcritos por Nitardo, otro nieto de Carlomagno, y vienen a ilustrar el momento en que el latín literario, utilizado en los documentos, dejó de ser inteligible por el pueblo.