Mayo de 1968 en Francia

Protestas en París en mayo de 1968

Se conoce como Mayo francés o Mayo de 1968 a la cadena de protestas estudiantiles, principalmente universitarias, y posteriormente sindicales que se llevaron a cabo en Francia y, especialmente, en París durante los meses de mayo y junio de 1968.

Esta serie de protestas espontáneas fue iniciada por grupos estudiantiles contrarios a la sociedad de consumo, el capitalismo, el imperialismo, el autoritarismo, y que en general desautorizaban las organizaciones políticas y sociales de la época, como los partidos políticos, el gobierno, los sindicatos o la propia universidad. Al movimiento estudiantil inicial pronto se unieron grupos de obreros industriales, los sindicatos y el Partido Comunista Francés,[1]​ aunque con objetivos principalmente laborales, no plenamente coincidentes en otros aspectos con los grupos estudiantiles. Ambos movimientos dieron como resultado la mayor revuelta estudiantil y la mayor huelga general de la historia de Francia, y posiblemente de Europa occidental, secundada por más de nueve millones de trabajadores.[2]​ El movimiento estudiantil tuvo influencias del movimiento hippie que se extendía entonces.

La magnitud de las protestas no había sido prevista por el gobierno francés, y puso contra las cuerdas al gobierno de Charles de Gaulle, que llegó a temer una insurrección de carácter revolucionario tras la extensión de la huelga general. Sin embargo, la mayor parte de los sectores participantes en la protesta no llegaron a plantearse la toma del poder ni la insurrección abierta contra el Estado, y ni tan siquiera el Partido Comunista Francés llegó a considerar seriamente esa salida.[2]​ El grueso de las protestas finalizó cuando De Gaulle anunció las elecciones anticipadas que tuvieron lugar el 23 y 30 de junio.

Cartel de mayo 68 que dice "Abolición de la sociedad de clases" (CMDO).

Los sucesos de mayo y junio en Francia se encuadran dentro de una ola de protestas protagonizadas, principalmente, por sectores politizados de la juventud, cuya ideología recorrió el mundo durante 1968. Estos sucesos se extendieron por la República Federal Alemana, Suiza, España, México, Argentina, Uruguay, Estados Unidos, Checoslovaquia e Italia, lo cual ampliaba la escala del antiguo refrán del siglo XIX afirmando que cuando París estornuda, toda Europa se resfría.

"Fin de la universidad".

La novedad de 1968, con respecto a otras luchas anteriores, proviene de los puntos de intersección y del cruce de compromisos: de Vietnam a Japón, pasando por Alemania, se encuentran lazos y puentes construidos entre los pueblos insurrectos, los estudiantes disidentes y los trabajadores sublevados. Globalidad y transmisión operan de forma circular: el acontecimiento es global, porque sus protagonistas viajan, transmiten, se apropian y revelan el desafío más allá de la patria. El internacionalismo apareció como un principio activo, un motor político decisivo. Ese saber se impregnó con descubrimientos, con la circulación de informaciones y transmisiones. Los estudiantes estaban más al tanto  que los obreros de sus vecinos europeos, e incluso miraban más allá, hacía ese vasto mundo, donde encontraban compromisos similares. Esto se explica debido a razones prácticas: originarios de medios sociales relativamente privilegiados, gozaban frecuentemente de los medios financieros para viajar; sus estudios los llevaban a tomar en cuenta otras culturas, practicar otras lenguas, a recibir en sus propias bancas a pares originarios de cualquier parte del mundo. Fue así como se puso en marcha la circulación de prácticas, ideas y solidaridades.[3]

  1. Sánchez-Prieto, Juan María (2001). «La historia imposible del Mayo francés». Revista de Estudios Políticos (Nueva Epoca) (112). 0048-7694, 109-133. 
  2. a b Hobsbawm, Eric J. Revolucionarios: Ensayos Contemporáneos. Barcelona: Ariel, 1978
  3. Bantigny, Ludivine (2018). 1968: de grands soirs en petits matins (en francés). Seuil. ISBN 978-2021301571. 

From Wikipedia, the free encyclopedia · View on Wikipedia

Developed by Tubidy