El modo es un rasgo gramatical que interviene en la conjugación verbal de muchas lenguas para expresar la modalidad. El modo describe el grado de realidad o la fuerza ilocutiva de la predicación verbal. Muchas lenguas modifican el modo mediante la inflexión del verbo. De entre los modos que se describen a continuación, varios no se utilizan en español. Nótese además que el sentido exacto de cada modo difiere de unas lenguas a otras.
El modo no debe confundirse con el tiempo o con el aspecto, aunque en ocasiones las lenguas del mundo, especialmente las fusionantes (como el español), usan morfemas que representan simultáneamente varias de estas categorías.
Algunos modos son: condicional, imperativo, indicativo, negativo, optativo, potencial y subjuntivo. Los modos originales del indoeuropeo eran el indicativo, el subjuntivo, el optativo y el imperativo. No todas las lenguas indoeuropeas tienen todos estos modos; solo las más conservadoras, como el griego antiguo o el sánscrito, los retuvieron. Algunas lenguas urálicas samoyedas tienen más de diez modos.