Se conoce como «Renacimiento de Disney» a la época comprendida entre 1989 y 1999, en la que Walt Disney Feature Animation (renombrado como Walt Disney Animation Studios en 2006) resurgió como una exitosa productora de películas animadas que restauraron el interés del público y de la crítica por The Walt Disney Company.[1][2] Las películas animadas se basaron principalmente en historias conocidas y siguiendo el modelo, tanto argumental como artístico, de los largometrajes animados del estudio de Walt Disney en la época dorada de Disney.[3][4]
Durante esta etapa, el estudio produjo y lanzó las siguientes películas animadas: La sirenita (1989), The Rescuers Down Under (1990), La bella y la bestia (1991), Aladdín (1992), El rey león (1994), Pocahontas (1995), El jorobado de Notre Dame (1996), Hércules (1997), Mulan (1998) y Tarzán (1999).[5] Asimismo, Fantasía 2000 (1999) y The Princess and the Frog (2009) son consideradas como las producciones del estudio posteriores que igualaron la animación tradicional, el argumento y la música de las películas del Renacimiento de Disney.[6][7]
Cabe señalar que las tres siguientes películas animadas anteriores a este período: The Rescuers (1977), The Great Mouse Detective (1986) y Oliver y su pandilla (1988) son consideradas como precursoras del Renacimiento de Disney, ya que otorgaron las bases para la calidad musical, artística y argumental, e incluso tecnológica, de los largometrajes animados de Disney en 1989 y los años 1990, además, de una recepción crítica de la que se esperaba un retorno a la época dorada de Disney.[8][9][10]