Las Unidades de Autodefensa (en alemán: Volksdeutscher Selbstschutz) es el nombre dado a las diferentes unidades de autoprotección étnico-alemanas formadas tanto después de la Primera Guerra Mundial como antes de la Segunda Guerra Mundial.
La primera Selbstschutz fue una organización paramilitar alemana formada después de la Primera Guerra Mundial para alemanes étnicos que vivían fuera de Alemania en los territorios ocupados por Alemania y Austria-Hungría tras la conclusión del Tratado de Brest-Litovsk. El propósito de estas unidades era proteger a las comunidades locales de origen étnico-alemán e, indirectamente, servir a los intereses de seguridad alemanes en el sur de Ucrania. Otra unidad de la Selbstschutz se estableció en Silesia y tuvo como objetivo devolver a Alemania los territorios habitados por los polacos después del renacimiento de Polonia. En 1921, unidades de la Selbstschutz participaron en las luchas contra el Tercer Levantamiento de Silesia en Polonia.
La tercera unidad operó en territorios de Europa Central y Oriental antes y después del comienzo de la Segunda Guerra Mundial, especialmente en Polonia, la Ciudad Libre de Danzig, Checoslovaquia y Ucrania.
En 1938, la Selbstschutz local inició una campaña en los Sudetes Checoslovacos para subyugar a los checos locales antes de la Conferencia de Múnich. Durante la Invasión de Polonia de 1939, varias unidades similares realizaron acciones de sabotaje dirigidas por los emisarios entrenados en la Alemania nazi. Estos grupos se fusionaron oficialmente en una sola organización, de carácter étnico-alemán denominada Volksdeutscher Selbstschutz (Fuerza de autodefensa) de más de 100,000 hombres. Tomaron parte en la lucha contra los polacos con estrategias como la Quinta Columna, pero también sirvieron como fuerzas auxiliares de la Gestapo, las SS y SD durante las primeras etapas de la ocupación de Polonia, y ayudaron a la administración nazi en el recién formado Reichsgau Danzig-Westpreußen y Reichsgau Wartheland. Sirvieron como controladores locales, informadores y miembros de escuadrones de ejecución particularmente activos en la ola de asesinatos en masa de la intelectualidad polaca durante la Operación Tannenberg y otras atrocidades más locales y vengativas. Los asesinatos de polacos y judíos atribuidos específicamente a miembros de Volksdeutsche Selbstschutz se estiman en un mínimo de 10,000 hombres, mujeres y niños.[1] La fuerza se disolvió en el invierno 1939/40 y la mayoría de sus miembros se unieron a las SS o la Gestapo alemanas en la primavera del año siguiente.